China y Rusia retratan a los oportunistas
El pasado lunes, 17 de noviembre, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el plan de EEUU y el despliegue de una fuerza internacional en Gaza. Esto quiere decir que el Consejo de Seguridad de la ONU aprueba un Plan que convierte a Gaza en una colonia norteamericana, en un pelotazo urbanístico de personajes como Trump o Blair, que se convertirán en los dueños de Gaza. Israel le hizo el trabajo de demolición de Gaza, ahora la ONU le pone una fuerza internacional, militar, para destruir la infraestructura militar de Gaza y perseguir y desarmar a la resistencia para que EEUU pueda expoliar a su gusto al pueblo palestino, lucrarse del genocidio y desmembrarlo por completo, desgajando totalmente Gaza de Cisjordania al objeto de garantizar la desaparición de ese pueblo como tal.
Esta votación favorable a los intereses norteamericanos y sionistas y contrario a Palestina, ha salido gracias a la abstención de Rusia y de China, que no han ejercido su derecho a veto en dicho Consejo de Seguridad. Una resolución del Consejo de Seguridad que ha sido rechazada por las organizaciones y Comités de resistencia populares palestinas.
Ese mismo día 17 de noviembre, los gobiernos de China y Siria se reunieron en Pekín para suscribir un acuerdo para intensificar su cooperación bilateral en combatir al terrorismo – cuando dicho gobierno sirio está compuesto por terroristas a sueldo de Washington que accedieron al poder por una entente entre las potencias imperialistas norteamericana (y su apéndice sionista de Israel) y rusa – en materia económica y en la reconstrucción de Siria.
Es importante recordar que el internacionalismo proletario, que atiende a la consigna dada por Marx y Engels en el Manifiesto del Partido Comunista de 1848 que dice “¡Proletarios de todos los países, uníos!”, tiene como principio fundamental la solidaridad proletaria revolucionaria y la cohesión de los obreros de todo el mundo, fundamentándose en la supeditación de los intereses nacionales a los intereses internacionales de la clase obrera, en el principio de la igualdad y de la soberanía de las naciones y de los estados, vinculando esa soberanía a los intereses del proletariado y de la lucha de clases, ligando la soberanía nacional a la lucha contra los monopolios, contra el imperialismo y por la unidad y cohesión de las fuerzas revolucionarias, en la defensa del derecho a la autodeterminación y a la unión voluntaria de los pueblos en pos de la conquista del socialismo.
A nadie se le escapa que el Consejo de Seguridad de la ONU, que ha sancionado el proyecto imperialista norteamericano para Gaza, al igual que el estado actual sirio y su gobierno, son títeres del imperialismo norteamericano.
¿En qué beneficia al proletariado el Plan de Trump en Gaza? ¿En qué beneficia al proletariado y a la causa del socialismo el desarrollo del estado títere sirio al servicio de los intereses sionistas y norteamericanos? ¿Y a la causa de la revolución proletaria mundial y del socialismo? Es evidente que en nada.
Sin duda alguna, China y las potencias BRICS mantienen una contienda interimperialista con el imperialismo norteamericano que se expresa en guerras en determinados puntos del planeta, en la guerra comercial, financiera y tecnológica, en la disputa por el control de los recursos energéticos, materias primas, cadenas de suministro y de producción globales. Una contienda donde lo que está en juego es la hegemonía imperialista, los intereses de los monopolios. Una pugna interimperialista por un “nuevo orden mundial” consistente en un reequilibrio de poder dentro de la misma formación socioeconómica mundial imperialista y no en la abolición de la explotación del hombre por el hombre, por la abolición de la formación socioeconómica imperialista y su sustitución por una socialista.
En este contexto, y ante la debilidad extrema del movimiento comunista internacional, que necesita zafarse del oportunismo para volver a sentar unas bases revolucionarias para la construcción de la revolución proletaria y del socialismo, el proletariado está siendo azotado sin piedad, de tal modo que a nivel interno de los estados se depauperan las condiciones materiales de los trabajadores, se tiran por tierra los salarios, se privatizan los sistemas de salud, educativos y de jubilación, se amplía la edad de jubilación que, en la práctica, es la negación de la jubilación en tanto las condiciones de vida de la clase obrera caen y, consecuentemente, también su esperanza de vida. En definitiva, se aplica una política económica conducente a transferir riqueza del proletariado hacia los monopolios y, a la par, se refuerza la represión contra dicha clase.
El proletariado únicamente tiene una salida: la revolución proletaria y la construcción del socialismo. Y ello no es posible sin la construcción de un movimiento comunista internacional nuevo, sin abatir al oportunismo que son las fuerzas del imperialismo en el seno del movimiento comunista y del movimiento obrero al objeto de corromperlo y pudrirlo, que es la manera más efectiva que tienen los imperialistas de mantener su dominio.
Los pasados días 8 y 9 de noviembre se celebró en Bellinzona, Suiza, el XXV Congreso del Partido Comunista de dicho país, cuya consigna era “Neutralidad- Paz – Trabajo”. En el estado español pudimos leer una reseña, de 12 de noviembre, por el PCPE, de dicho congreso donde se podía leer “Un congreso netamente antiimperialista, con la presencia de delegaciones diplomáticas de China, Corea Democrática, Cuba o Laos entre otras”. Cinco días después, el 17 de noviembre, una parte de ese “congreso netamente antiimperialista”, se alineaba con el imperialismo norteamericano contra Gaza y reforzaba al estado sirio nacido del golpe de estado perpetrado contra el pueblo sirio por el imperialismo norteamericano y sus socios sionistas y turcos. Recordemos lo que decía dicho partido oportunista de los “pueblos de España” en diciembre del 2024 con respecto del gobierno sirio con el que se reunieron y estrecharon relaciones una parte de ese “congreso netamente antiimperialista” del que hablaban el 12 de noviembre de 2025 en Suiza:

Resulta que esa China “antiimperialista” que ve el PCPE se reunió en Pekín, y estrechó lazos económicos y políticos con “las hordas terroristas de mercenarios, armadas y dirigidas por el imperialismo y el sionismo”. ¡Ahí tenemos al oportunismo! Blanqueando al imperialismo y engañando a la clase obrera y, sobre todo, escupiendo y envileciendo al marxismo-leninismo, echando toneladas de basura ideológica contra la ciencia emancipadora del proletariado mundial, la ciencia de Marx y de Lenin. Como puede comprobarse, el oportunismo no solo es una creación del imperialismo, su función es parasitar el movimiento comunista y el movimiento obrero para desviarlos de la materialización de su misión histórica, la abolición del imperialismo y la construcción del socialismo.
Los imperialistas saben que se están jugando el todo por el todo, su supervivencia, y saben que la humanidad jamás se podrá emancipar sin la guía emancipadora del proletariado, el marxismo-leninismo, y sin el instrumento que fusiona esa guía con el sujeto revolucionario, el proletariado, que es el Partido Leninista, el movimiento comunista internacional. Por ello, los imperialistas lo apuestan todo al fascismo, al anticomunismo, al oportunismo, en definitiva, a la represión brutal del proletariado, de los pueblos del mundo, al que hacen todo lo indecible para evitar que tome conciencia de lo que es, la clase revolucionaria que tiene la misión histórica de construir un nuevo mundo, una nueva formación socioeconómica mundial socialista donde se armonicen las fuerzas productivas y las relaciones de producción, donde la humanidad – la internacional – escriba conscientemente la historia y se ponga en el centro de todo armonizando su relación con la naturaleza de la que forma parte.
¡MUERTE AL IMPERIALISMO Y AL OPORTUNISMO QUE INOCULA EN EL SENO DEL PROLETARIADO!
¡POR LA CONSTRUCCIÓN DE UN MOVIMIENTO COMUNISTA INTERNACIONAL REVOLUCIONARIO!
¡SOCIALISMO O BARBARIE!
Madrid, 20 de noviembre de 2025
COMITÉ EJECUTIVO DEL PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (P.C.O.E.)