El PCOE de Sevilla ante el colapso de los centros de salud
Como denunciaba el PCOE el 12 de mayo de 2020, el “plan de choque” en la sanidad andaluza se está aplicando a sangre y fuego, pero no con el objetivo anunciado de aligerar las listas de espera, sino todo lo contrario, dejar bajo mínimos el sistema de salud público en beneficio de los grupos de sanidad privada que como aves de rapiña parasitan nuestra salud y dinero público.
La receta, reconocida por los propios responsables en 2019, como el gerente del hospital de Osuna, era clara: “lo que hacemos es que con los mismos profesionales que tenemos se refuerzan y a base de ampliar sus horarios de trabajo […] con los profesionales y los medios materiales que tenemos se pueden organizar las cosas para que se atienda un mayor número de personas”.
La situación ya está estallando en los centros de atención primaria de la provincia de Sevilla, donde se concentran cientos de vecinos por la imposibilidad de conseguir siquiera una cita con el médico de cabecera. Lo cual está provocando que muchos pacientes no puedan continuar sus tratamientos: enfermedades respiratorias, diabetes, cáncer, mamografías, pediatría, … están dejando de ser atendidas porque todo el personal lo han desviado para responder a la pandemia del COVID-19. En realidad, la pandemia la están utilizando como excusa para dar un hachazo más a la atención sanitaria que recibe el pueblo trabajador.
Desde Salud Responde o bien no responden, o mantienen en cola de espera durante horas o no dan citas en 15 días. Trabajadores de dicho servicio denuncian que hay hasta 2000 chats de dudas sin responder cada día. En una sala con capacidad para 110 trabajadores sólo hay 65. El servicio de Salud Responde fue adjudicado por 9,9 millones de euros a la empresa Ilunion del grupo ONCE, que ofrece condiciones miserables: salario bruto de 250 euros al mes por trabajar sólo fines de semana. Ilunion es un grupo empresarial que saca plusvalías extra contratando personal con discapacidades, obteniendo subvenciones, pero que realizan las mismas tareas que si no tuvieran ninguna discapacidad.
El personal de atención primaria denuncia que no pueden más, todas sus tareas están absorbidas por el seguimiento de los casos de COVID-19, sin poder atender el resto de pacientes. Tienen que identificar, valorar gravedad, solicitar PCR, aislar, dar de baja laboral, rastrear, contactar, resolver dudas… Todo esto con agendas ya sobrecargadas de entre 40 y 80 pacientes. Así lo afirma Carmen González, médica de familia y presidenta de la asociación “Basta Ya” de médicos de atención primaria: “Parece que no valemos nada. Que da igual cómo atendamos al paciente. No puedo atender un caso de violencia de género en cinco minutos. Nos vamos a volver locos, cometemos errores…”.
La situación está siendo más evidente en atención primaria, pero afecta a todos los ámbitos del sistema de salud. El sábado 29 de agosto, se mandató a enfermeras del Centro de Salud de Mairena del Aljarafe en Sevilla dejar el puesto de Urgencias para realizar PCR a la residencia de ancianos de Vitalia de la misma ciudad. Las matronas del Hospital de la Mujer de Virgen del Rocío de Sevilla, una vez más, han tenido que hacer huelga ante la falta insostenible de personal. Hasta 4 puestos sin cubrir en turnos de 10.
Según el Sindicato de Enfermería SATSE de Sevilla “el aumento de la presión asistencial tanto en Primaria como en los centros hospitalarios, las largas colas para ser atendidos en los centros de salud, las demoras de más de 14 días para obtener una cita o la imposibilidad de contactar por teléfono con los mismos, están provocando un incremento de las situaciones de tensión y un colapso del sistema que requiere de una intervención urgente”.
Este problema es estructural. No hemos de olvidar el colapso de las urgencias de los hospitales sevillanos, especialmente en épocas de epidemia de gripe, como en 2018 en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, con el PSOE en el gobierno andaluz:
El Comité Provincial del PCOE de Sevilla señala al Estado español y a la Junta de Andalucía, los partidos que han gobernado en todos los ámbitos desde hace 40 años – PSOE-PP-IU-PCE-PODEMOS-Cs – como los verdaderos responsables de esta situación, habiendo provocado muertes desde hace muchos años, y que provocarán con mayor intensidad ahora, por la falta de atención de innumerables patologías con la excusa de la pandemia.
Estos no son más que otros de los efectos de los rescates millonarios a la banca y grandes empresas que desde 2008 llevan ejecutando los distintos gobiernos estatales y autonómicos, con mayor intensidad aún en 2020 porque ya el sistema capitalista no levanta cabeza sin esos rescates.
Por tanto, si queremos acabar con los problemas del ámbito sanitario, del educativo, del laboral, de las pensiones, del paro y de la pobreza, que están aumentando exponencialmente, hemos de salir de las soluciones puntuales, sectoriales y a corto plazo, que es como pretenden los gobiernos sofocar el descontento de las clases populares.
Hemos de ir a la raíz, tomar el control y la gestión de los recursos, no sólo de los que concentra el Estado, si no los que acumulan los monopolios y grandes empresas de los sectores estratégicos de la sociedad. Porque son éstos los que en realidad gobiernan y deciden cuántas personas de las clases trabajadoras han de morir para enriquecer a sus dueños y rescatarlos a ellos de sus crisis.
Hemos de remplazar, por tanto, un Estado burgués al servicio de la banca y los grandes empresarios, por un Estado obrero, emanado desde abajo a través de representantes directos en los centros de trabajo (comités de empresa, juntas y delegados de personal), barrios (asociaciones de vecinos), centros de estudio (delegaciones de alumnos), madres y padres de alumnos (AMPAs) junto con asambleas de jornaleros y pequeños campesinos en los pueblos.
Por la Unión de todas las Luchas en una sola
Por la Construcción del Frente Único del Pueblo
Por la superación del Capitalismo y la edificación del Socialismo
Comité Provincial del Partido Comunista Obrero Español (PCOE) de Sevilla