Lucha en Bimbo: La burguesía juega con el sustento de los trabajadores

Desde el 9 de octubre, los trabajadores de Bimbo Valladolid luchan por evitar el cierre de la planta, y la empresa apenas ha mostrado intención de negociar ni de concretar qué es lo que va a ocurrir con dicha planta. Una vez más, nos encontramos con que la burguesía hace y deshace a su antojo, pudiendo arrojar al paro a aquellos a quienes deben toda su riqueza y preocupándose solamente por las opciones que puedan proporcionarles la máxima ganancia.

Desde las adquisiciones de Panrico han ido cerrando fábricas, y este sería un episodio más. Los trabajadores han optado por la huelga al ver peligrar sus puestos de trabajo sin ninguna garantía de nada, más allá de unas vagas declaraciones por parte de la empresa. Trabajadores de otros centros han mostrado su apoyo y han acudido a las concentraciones, pero es menester que la clase obrera alcance una visión más amplia del problema para comenzar a vislumbrar la vía que nos llevará a una auténtica posición de fuerza: la organización como clase.

Como era de esperar, sindicatos de la patronal como CC.OO. maniobran para llevar las riendas de la huelga y las negociaciones, para acabar llevando la lucha hacia el objetivo de la empresa desmovilizando a la plantilla. Las vagas luchas por las migajas son solo intentos de llevar a la clase obrera a la misma situación de inmovilismo y normalización de esclavitud asalariada, y solo consiguen retrasar lo inevitable hasta que los parches no aguanten la insostenible situación.

Si bien son dignas y necesarias las uniones de los trabajadores de una misma empresa, es totalmente necesaria la organización de toda la clase obrera. La burguesía no hace más que desgastarnos, atomizarnos, ofrecernos falsas alianzas y culparnos de nuestras desgracias, pues saben de sobra que nuestra división es fomentar el individualismo y la competición por las migajas, mientras que nuestra unión es la fuerza que compite contra el capital; contra la forma de vida parasitaria de esa minoría que no hace más que chuparnos la sangre en cada jornada de trabajo, y nos amenaza tácitamente con la pérdida de nuestro sustento.

Desde el PCOE apoyamos la lucha de los trabajadores de Bimbo, pero hay que ser conscientes de que la raíz de los problemas no está en la situación concreta de cada centro de trabajo o del asalariado en cuestión, sino en una economía basada en la explotación humana, en el robo, en la barbarie. Para acabar con ello el único camino es el que la burguesía más teme: nuestra unión como clase y tomar conciencia de clase, de quiénes son nuestros enemigos fuera y dentro de nuestras filas. Para esto, se ha de alejar la influencia de los encantadores de serpientes que se dedican a dinamitar las luchas desde dentro, que conducen a la clase obrera a la derrota por la vía del reformismo, del legalismo. Es fundamental fortalecer el sindicalismo de clase y su unidad, la unión de la lucha de los centros de trabajo con la lucha social, fusionándose todas las luchas en una única lucha de clase contra el capitalismo y su Estado, y elevando la lucha económica a lucha política e ideológica, debiéndose fortalecer el Partido, al objeto de transformar revolucionariamente la sociedad acabando con este sistema económico podrido y construir el Socialismo haciendo que todo el poder pase a manos del proletariado, la única manera existente para que la clase obrera tenga derechos y pueda vivir en dignidad, de lo contrario lo único que nos espera a los proletarios es sufrimiento, explotación y muerte.

 

¡Socialismo o Barbarie!

Comisión de Movimiento Obrero y de Masas del Comité Central del PCOE

Deja una respuesta

Your email address will not be published. Required fields are marked *